Richard Ashcroft, la voz de The Verve que marcó a una generación
Richard Ashcroft cumple hoy 54 años. Bien, si su nombre no te dice nada, seguro te suena tal vez su más conocida creación, un tema que se convirtió en himno de los 90. Hablo de “Bitter Sweet Symphony”.
El flaco (muy flaco) fue la voz y la cara de The Verve, una banda británica que mezcló psicodelia, rock y épica callejera. Después siguió como solista, con discos cargados de mística y letras que parecen hablarnos desde un rincón íntimo.
Es de esos cantantes que no necesitan disfraz: sube al escenario, agarra el micrófono y te convence de que el rock todavía tiene algo que decir. Tal vez por éso su cumple lo celebramos como lo que es: un poeta eléctrico del rock británico.
Su voz áspera, su lírica introspectiva y su presencia magnética lo convirtieron en referente del britpop y en un solista de vuelo propio, capaz de mezclar épica y vulnerabilidad.
Hoy entonces, la invitación es simple: te invito a ponerlo en tus auriculares y dejá que su música te recuerde que cada día puede ser una nueva sinfonía. Y no necesariamente sea agridulce.
